Nivel de violencia

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En una plática reciente, un par de chicos cuestionaban si había alguna forma de medir la violencia en las relaciones. Es decir si hay algún nivel de violencia que pueda ser catalogado de "grave" y entonces hablar realmente de violencia en la pareja.



Efectivamente no hay todavía un índice para medir la violencia, no hay un instrumento que diga "de la raya para arriba es violencia o de la raya para abajo no lo es". Eso no significa que no se puedan evidenciar las conductas violentas en un relación.

Esto es así porque la violencia no se mide en cantidad, sino que se evidencia con actos. Las acciones violentas son violencia por mínimas que sean; pero estamos tan acostumbrados a la violencia que muchas conductas violentas las consideramos "normales".

El par de chicos de la plática son perfecto ejemplo de ellos, cuando les mencioné que había parejas que amenazaban con suicidarse si las dejaban y que eso era violencia, en automático uno de ellos me contestó: "bueno, pero eso es muy común". Aunque muy probablemente el muchacho no caiga en ese tipo de manipulaciones para mantener a la fuerza y en contra de su voluntad a una pareja, es obvio que lo consideraba como un hecho frecuente(que sí lo es), y en nuestra sociedad se tiende a interpretar lo frecuente como lo "correcto" o por lo menos no dañino.

En México se estima que una de cada tres relaciones de pareja se vive con violencia, no sólo física sino verbal y psicológica. La violencia en las parejas es extremadamente frecuente; pero eso no significa que sea inocua.

De hecho difícilmente se puede hablar de un nivel de violencia que sea inocuo o tolerable, que no cause daño. Todo acto violento es una agresión hacia otra persona y causa daño, las consecuencias derivadas de esas acciones dependerán en gran medida de la frecuencia de las agresiones y de la propia capacidad de la víctima para enfrentarlas.

Si una persona insulta a su pareja, por muy "pequeño" que parezca el insulto, sigue siendo violencia. Resulta curioso que cuando las personas hablan de amor y relaciones de pareja, se dice y se insiste en que debe haber respeto por sobre todas las cosas; pero al mismo tiempo una gran cantidad de individuos tiene la absoluta certeza de que decirle tonto o tonta a su pareja "no es para tanto".

El problema es que la violencia es progresiva, alguien que me dice tonto una vez muy probablemente lo hará más veces y también es probable que la gravedad de los insultos vaya en aumento. Si antes era tonto, quizá después será idiota y más adelante eso se puede convertir en un golpe directo.

Así pues, ¿cómo saber qué nivel de violencia es tolerable? La respuesta es ninguno, pero como individuos habrá cosas que quizá no nos afecten tanto como otras. El factor para decidir que tan agresivo es un acto violento, radica en qué tan mal me hace sentir.

Si al hablar con la pareja y decirle que tal o cual cosa nos hizo sentir mal de alguna manera, la otra persona hará todo lo posible para no repetir su conducta y modificarla; pero si de entrada esa persona no cree haber hecho nada incorrecto y minimiza o ridiculiza tus sentimientos, entonces estamos ante una relación que sufre violencia y cuyo grado aumentará paulatinamente hasta hacerla insostenible.

Un agresor jamás admite que es violento y por el contrario te culpará de sus propias acciones sin asumir ninguna responsabilidad.

Vivimos en una sociedad muy tolerante con la violencia, por esa razón muchas de nuestras conductas son dirigidas de forma agresiva para tratar de controlar de alguna forma a quienes nos rodean. La única forma de cambiar esto es ser conscientes de esta agresividad y modificar nuestras conductas.